De Todo Un Poco

La PC de casa, la del trabajo, la notebook… Y tener sincronizados los archivos entre ellas es un tema bastante complicado, sobre todo con los documentos. A veces lo que sucede es que tenemos diferentes versiones del mismo archivo en diversas computadoras, y no siempre sabemos cuál es la última que editamos.

Para esos usuarios que necesitan usar varias computadoras y mantener sincronizados sus archivos, una excelente alternativa es DropBox. Se trata de un programa que hay que instalar en las computadoras que queremos asociar al servicio.

Basta con que coloquemos un archivo allí para que se sincronice de manera automática con las otras PCs. Incluso, podemos editar un documento que se encuentra en la carpeta Dropbox, y al guardarlo el resto de las computadoras se actualizará.



Puedes compartir tus ficheros. Puedes decidir que ciertas personas tienen que poder acceder a determinada carpeta. Todo lo que dejes ahí se sincronizará con tus colegas.
Cuando ellos dejen algo (o modifiquen algo), verás que tu carpeta compartida recibe los cambios instantáneamente.

Por otra parte, si has editado un fichero en DropBox mientras estabas sin conexión, no pasa nada. Cuando la aplicación detecte que vuelve a haber tráfico, se sincronizará contra el servidor central y éste repartirá los cambios (si es necesario) entre las carpetas de los clientes “apuntados” a esa carpeta DropBox.


DropBox es multiplataforma: funciona en Linux, MacOSX y Windows. Es un servicio gratuito, hasta 2GB. A partir de ahí, lógicamente tendrás que pagar por el servicio.



Tenemos también la posibilidad de compartir cualquier fichero vía web: botón derecho sobre el fichero, extraer URL para compartir. Esa URL la podremos dar a nuestros contactos para que a través del navegador puedan acceder a dicho fichero.


También se pueden compartir archivos y carpetas con otros usuarios que tengan instalado Dropbox. Sólo hay que conocer la dirección de correo electrónico de esa persona.